sábado, 2 de enero de 2016

DRONES, LA INVASIÓN (EPISODIO #14)


Entrando a casa advertía que habían restaurado el suministro de electricidad. Al menos cuatro luces estaban encendidas pese a que el sol brillaba sin piedad. Había traído provisiones en unas cajas acartonadas que por cierto me había costado horrores trasladar. Curiosamente la televisión transmitía imágenes con total normalidad, excepto los canales argentinos que habían desaparecido. Todo parecía indicar que no habían quedado seres humanos en Argentina, excepto yo y mi soledad. Y todo hacía presumir que la raza humana había acordado la entrega de mi soberanía. Pero, ¿dónde estaban esos aparatos despiadados? Extrañadamente no reaparecían. Tal vez una ducha fría podía ayudarme a pensar con claridad. Después de todo ya me había quitado el pantalón y mi calzoncillo necesita un poco de jabón.